Entre los centros de acupuntura de Sevilla en el nuestro intentamos ofrecer siempre a nuestros pacientes un tratamiento que sigue todos los postulados de esta medicina milenaria china. Y en esta nueva entrada de nuestro blog queremos ofrecerte unas pinceladas de la historia que hay detrás de esta técnica.
Para hablar de los orígenes de la acupuntura tenemos que remontarnos varios milenios atrás. La primera referencia que se registra está en un antiguo texto chino conocido como “Clásico de Medicina Interna – Libro de Preguntas Comunes del Emperador Amarillo”. El estudio de este y otros textos sugieren que la acupuntura puede descender de la práctica de la sangría.
Por otra parte, unos textos encontrados hace cuatro décadas en una tumba de la dinastía Han Occidental y que están datados entre el 200 y el 220 a. de C. ofrecen la primera imagen del sistema vascular de la literatura china. Los canales eran vistos como estructuras orgánicas llenas de sangre y las enfermedades se identificaban determinando los canales cuyo curso coincidía con la presentación de dolor o molestia. Así, se pensaba que la extracción de sangre eliminaba la sustancia causante de la enfermedad. No obstante sufrió alguna evolución.
Las primeras agujas estaban fabricadas con piedra, a diferencia con las actuales de acero inoxidable.
En el siglo VI la acupuntura empieza a entrar en Corea y Japón. Desde allí continuó avanzando hacia el Sur de la India y a países del sudeste asiático como Vietnam. Pero no sería hasta el siglo XVI cuando llegara a Europa.
Y continúa extendiéndose por muchos lugares gracias a los centros de acupuntura de Sevilla como el nuestro.
En la Escuela Hufeland Medicina Natural podrás comprobar cómo la medicina tradicional puede ofrecerte muy buenos resultados para aliviar tus dolencias.